El gran secreto de la Reina Letizia que el fuego extinguió para siempre

La historia de amor del Rey Felipe y la Reina Letizia comenzó hace dos décadas, y poco y nada se sabe sobre el momento en el que, los ahora Reyes de España, se conocieron. En los últimos años se tejieron numerosas hipótesis, pero nadie sabe a ciencia cierta cuándo ocurrió el primer flechazo. 

Una de las personas que más conoce los entretelones de lo que sucede dentro de Zarzuela es la periodista Pilar Eyre. En la última entrega de su blog "No es por maldad" (Lecturas) ha dejado algunas pistas y, además, ha contado uno de los secretos mejores guardados por la Reina Letizia.

Sin dejar en claro su fuente, la escritora sostuvo que todo se inició cuando "el navegante Kitín Muñoz, que fue noviete de Letizia durante un par de meses, se la presentó a su amigo Felipe y hubo flechazo… por parte de él. Ella se resistía, y esto al Príncipe, que siempre lo había tenido muy fácil con las mujeres, lo volvió loco. También le encantaba que ella fuera respondona, descarada, que supiera de todo, que no se callara nunca, y ese lenguaje popular tan distinto del que utilizaba su entorno, una endogamia de amigos pijos que se conocían desde la cuna".

Lo cierto es que este amor entre el Rey Felipe y la ahora Reina Consorte se mantuvo en secreto durante casi un año, hasta que en 2003 llegó el ultimátum del todavía Príncipe a su padre: "Letizia o nada".

Durante sus primeros meses en Zarzuela, la Reina Letizia tuvo que aprender, desde cero, una serie de protocolos para que su desempeño dentro de la Familia Real sea el adecuado, como así también cada vez que apareciera en público.

Es por eso que los encargados de su nueva educación real le recomendaron que hiciera listas para así recordar cada uno de los pasos que debía dar: "Haga listas, señora". ¿Y qué hacía la asturiana? Escribirlo todo en una libretita, una especie de diario íntimo y personal, un «cuadernito en el que apuntaba todo". Esos manuscritos existieron hasta que Felipe le pidió que los eliminara. "Felipe se lo hizo destruir para que no cayera en manos ajenas", reveló Pilar Eyre.

La propia escritora especula que "cuando quemó esa especie de diario en la chimenea del palacio, quizás se dio cuenta también de que quemaba su pasado para empezar una nueva vida". Es que la Reina Letizia tuvo que dejar atrás todo su pasado, su profesión de periodista, para comenzar una etapa que marcaría el resto de sus días.